Preparación física
La preparación física que necesitas para realizar el Camino de Santiago es fundamental para no venirte abajo a mitad de Camino; para poder disfrutar en condiciones de esta aventura debes llevar a cabo un plan de entrenamiento con margen suficiente como para afrontar tu aventura con todas las garantías.
Es recomendable hacerse un reconocimiento médico
Lo primero si sufres alguna patología o si tu edad es avanzada es recomendable pasar un chequeo médico antes de comenzar con el entrenamiento.
Planificación de tu entrenamiento
El entrenamiento debe empezar varios meses antes de comenzar el Camino de Santiago. Durante este tiempo tienes que acostumbrar a tu cuerpo a un plan continuo de entrenamiento. Tendrás que ir entrenando de menos a más intensidad, teniendo en cuenta que cada etapa del Camino de Santiago dura entre 23 a 25 km, tu objetivo será caminar esa distancia, pero al final de tu periodo de entrenamiento.
Durante las primeras etapas tendrás que acostumbrarte a caminar como mínimo unos 3 días a la semana y cada vez con más distancia. Cuando vayas por la mitad de tu entrenamiento tendrás que aumentar un poco la intensidad de tus entrenamientos, saliendo más días a la semana entre 4 y 5 días y añadiendo más dificultad al entrenamiento, por ejemplo caminando por superficies más complicadas o aumentando el ritmo. En las últimas semanas de entrenamiento es recomendable hacer un tipo de entrenamiento más duro que todos los anteriores, un tipo de ejercicio bastante efectivo es caminar con un mochila que lleva más o menos un 10% de tu peso.
En clase de educación física hemos estado aprendiendo como podemos realizar un plan de acondicionamiento física para poder realizar actividades como esta satisfactoriamente.
Este trabajo nos ha servido para poder aprender a planear nosotros mismos nuestro entrenamiento y poder tener la seguridad suficiente para saber que lo estamos haciendo bien.
Aquí podemos ver algunos planes de acondicionamiento físico realizados por algunos alumnos:
También hemos documentado varios tipos de estiramientos para evitar el riesgo de lesiones durante el Camino de Santiago. Aquí están unos pocos de los muchos estiramientos que hemos documentado:
Vigilar la alimentación e hidratación antes de partir
La ingesta de líquidos y alimentos en el Camino es vital para evitar deshidrataciones, desfallecimientos o calambres. Es recomendable beber unos 2 litros diarios como mínimo y durante el entrenamiento tener un hidratación óptima, ya que si no consumimos el agua necesaria podríamos sufrir una lesión que nos dejase en casa, también tienes que tener buena alimentación evitando las comidas pesadas y tener una dieta rica en hidratos y legumbres.
Para poder tener más información sobre este tema tenemos otra sección en nuestro blog más reflejada a la alimentación recomendable para poder realizar este tipo de actividades.
https://vivecamino.com/preparacion-fisica-camino-santiago-no-491/
0 Comentarios:
Publicar un comentario